07/09/2020 – “Cuando hablamos de abandono tenemos una figura extraordinaria para iluminar este tema: Jesús en Getsemaní, en su angustia de muerte. Allí tenemos la síntesis de los abandonos posibles”, dijo el Padre Mateo Bautista, sacerdote camilo, quien nos acompaña cada lunes en el programa “Hoy puede ser”.
¿Qué tipo de abandono podemos experimentar? Hay diversos tipos de tentaciones de abandono: – El abandono a uno mismo: no quererse, desmotivarse, desvalorizarse, matar el futuro. – Abandonar a los demás: no contar con los otros. – Sentirse abandonado por los demás: “nadie me entiende”, “me dejan solo”, “no se ocupan de mí”. – Sentirse abandonado por Dios: justo cuando más necesitamos a Dios, nos sentimos abandonados por Él. – Abandonar a Dios: esta tentación es de las más graves.
Abandono en la dimensión física “En el sufrimiento el primer abandono es el de la corporeidad. Esto no sólo que aumenta el sufrimiento, sino que la persona se hace daño a ella misma: descuida la alimentación, descuida el sueño, no descansa, se maltrata físicamente, no se hace atender por ciertas patologías, se dejan estar. Esta es la lógica insana del sufrimiento. Por eso cuando sufrimos lo importante es cuidarnos, cuidar a los demás y dejarnos cuidar por otros.”
Sufrimiento sano e insano “Los duelos no sólo es un tema de estabilidad emocional para dejar de sufrir, sino que hay que ir a la raíz. La lógica del sufrimiento nos quita las fuerzas, nos desmotiva, nos quita las ganas. Si todo esto hace la lógica del sufrimiento, entonces, ¿qué hay que hacer? Tenemos que tener presente lo siguiente: o yo domino al sufrimiento o el sufrimiento de me domina a mí; y recordar que todos somos sanadores heridos. Nunca hay que desmerecer la herida, pero hay que tener en cuenta que tengo que hacer algo con esa herida, no puedo quedarme pasivo. El duelo es trabajo, es arduo y laborioso, ya que hay que ser pacientes para que la herida cierre del todo. Nadie sale del sufrimiento sin sufrir. Pero hay un sufrir insano que añade sufrimiento. Por eso tengo primero que aceptar el sufrimiento, segundo ser activo en el trabajo del duelo, y tercero, ser paciente y convaleciente para rehabilitarme.”
No te pierdas de escuchar la entrevista completa en la barra de audio debajo del título.
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