19/02/2020 – Nuestro país es uno de los que registra el índice más alto de mortalidad a causa de accidentes de tránsito. El año pasado murieron 6.627 personas, casi 20 personas por día. Varias de estas muertes ocurrieron como consecuencia de accidentes en los que estuvieron involucrados colectivos o micros de doble piso.
En los últimos meses, quizá por el incremento de viajes de temporada veraniega, se registraron varios accidentes con estos coches. Al punto de que el Gobierno se ha comprometido a estudiar si estos vehículos ofrecen o no la seguridad necesaria como para obtener la autorización de circular por las rutas argentinas.
Por las características de sus carrocerías, por la altura y la menor estabilidad, en otros países sólo permiten recorridos cortos a estos colectivos. Aquí, en Argentina, el 98,8 por ciento de los coches de las flotas de las empresas de transporte de larga distancia son vehículos de doble piso.
Al respecto, y en diálogo con nuestra emisora, Roberto Tomassiello, diseñador industrial, docente en la Universidad Nacional de Cuyo, director de Programas y Proyectos de Investigación, y especialista en ergonomía aseguró: “El problema de la siniestralidad vial responde a una multicausalidad de factores y en este caso puntual de los ómnibus de elevada altura hay que analizar el conjunto de factores que puede llegar a la ocurrencia del siniestro”.
Para el especialista “el ómnibus, en cuanto a sus características, diseño, altura es una parte de esos factores pero también no hay que olvidar el tema de las velocidades, los conductores, las horas de trabajo y los tiempos de descanso de los mismos”.
Por su parte, y en coincidencia con Tomassiello, Fabián Pons, presidente del Observatorio Vial Latinoamericano (OVILAM) consideró que “la cuestión de lo peligroso o no peligroso de un micro de doble piso no es algo solamente intrínseco del vehículo osea, es un vehículo que tiene un centro de gravedad más alto y cualquier chico de secundario que sepa algo de física sabe que, mientras más alto esté el centro de gravedad más inestable es ese vehículo y más tendencia a volcar tiene”.
Según Pons, “la cuestión pasa por otro lado también, primero por las condiciones de uso, es decir que hay que ver cómo está cargado ese vehículo, antigüedad, etc. Por otro lado están las condiciones en las que se mueve ese vehículo: a que velocidad se va a mover, porque rutas, que tanta seguridad tienen esas rutas, quienes los conducen, qué habilidad tienen, que capacitados están y que descansados están”.
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