Evangelio según San Juan 3,16-21

lunes, 24 de abril de
image_pdfimage_print

Sí, Dios amó tanto al mundo, que entregó a su Hijo único para que todo el que cree en él no muera, sino que tenga Vida eterna. Porque Dios no envió a su Hijo para juzgar al mundo, sino para que el mundo se salve por él.»

 

El que cree en él, no es condenado; el que no cree, ya está condenado, porque no ha creído en el nombre del Hijo único de Dios. En esto consiste el juicio: la luz vino al mundo, y los hombres prefirieron las tinieblas a la luz, porque sus obras eran malas.

 

Todo el que obra mal odia la luz y no se acerca a ella, por temor de que sus obras sean descubiertas. En cambio, el que obra conforme a la verdad se acerca a la luz, para que se ponga de manifiesto que sus obras han sido hechas en Dios.

 

 

Palabra de Dios

 

 

 

 

 


 

P. David Pintos 

 

 

 

 

Dios amo tanto al mundo… entregó a su único Hijo para que el mundo no muera sino que tenga vida eterna… lo envió para salvarnos de la oscuridad de la muerte… lo que celebramos en la Pascua, el motivo por el que estamos felices es el amor que Dios tiene para con todos nosotros. En la Pascua celebramos que Dios nos ama y que su amor nos salva. Porque es así el amor salva!!! Dios para salvarnos nos amo. Que lindo saber eso para que siempre nos demos cuenta que nosotros no valemos cualquier cosa, valemos el amor de Dios.


Ese acto de amor de Dios por nosotros nos tiene que impulsar a todos a hacer lo mismo. A salvar a los demás amando. Porque seguramente es así, hay muchas personas a la cual tengo que salvar ¿Quiénes son? ¿a quién tengo que salvar amando? A quienes tengo que rescatar de la oscuridad y de las obras de muerte? Dios para salvar entregó lo más preciado que tenía: su único Hijo. Nosotros para salvar ¿Qué entregamos? Porque el amor es ante todo un acto de entrega total. Porque el amor nos algo que se queda en el aire sino que se manifiesta y toca concretamente. Porque como dice Don Bosco “No basta decir que uno ama, el otro tiene que sentir que es amado”. Si queremos salvar tenemos que amar. Entregando lo mejor de cada uno y que el otro sepa que es amado.


Damos gracias Dios porque su amor nos salvó. Le pidamos que nosotros también salvemos amando entregando lo mejor de cada uno.


Bendecida jornada para todos!

 

Radio Maria Argentina