Jesús dijo a sus discípulos: “No se inquieten. Crean en Dios y crean también en mí. En la Casa de mi Padre hay muchas habitaciones; si no fuera así, se lo habría dicho a ustedes. Yo voy a prepararles un lugar. Y cuando haya ido y les haya preparado un lugar, volveré otra vez para llevarlos conmigo, a fin de que donde yo esté, estén también ustedes. Ya conocen el camino del lugar adonde voy”.
Tomás le dijo: “Señor, no sabemos adónde vas. ¿Cómo vamos a conocer el camino?”.
Jesús le respondió: “Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida. Nadie va al Padre, sino por mí.”
Palabra de Dios
P. Nicolás Retes sacerdote de la Arquidiócesis de Buenos Aires
Queridos amigos de Oleada joven, la palabra de Dios de este día nos presenta a Jesucristo, como camino, como Verdad y como Vida.
¿Cuántas personas tendrían una vida diferente si aceptarán esta verdad?.
Y si ! Jesucristo tiene pensado para nosotros un plan , una misión, que no termina aquí en la tierra sino que se extiende en el cielo. Y consiste en poder participar de la eternidad junto a Dios.
Por eso nos habla que en su casa de Su Padre hay muchas habitaciones. Cada uno de nosotros tiene preparado un lugar por el propio Jesús.
¡Pero claro! la vida en el cielo, la vida viéndolo cara a cara a Dios, está relacionada, como podamos vivir aquí, día a día.
O sea, nuestro vivir, aquí en la tierra, nuestras actividades cotidianas, nuestras preocupaciones, nuestro hacer, nuestro querer, tienen que ver, aquí en la tierra, con lo que va a ocurrir luego en el cielo, es estrechamente vinculado.
Por eso Jesús, se anima a decirnos que: “Conocemos ya, cual es el camino que nos ha preparado”, “el camino al lugar donde El va”.
Jesucristo, Su persona, el encuentro personal con El es realmente participar ya de ese camino, de la verdad y de la vida que El nos ha venido a traer.
Por eso siempre, cada mañana y cada noche, volvemos a optar, le volvemos a decir: “Que sí, que lo queremos seguir siempre de cerca”.