Si tan solo me dieran un minuto

lunes, 26 de junio de
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Si tan solo me dieran un momento para verme en el espejo diria que me veo desolado aunque con muchas ganas de salir adelante, esas ganas que me impulsan a seguir son las pequeñas cosas que lucho para no perderme de vista, como el sol, las estrellas, un amanecer, la sonrisa de esa mujer ya con las arrugas en su piel y con el corazon de risas a pesar de sus heridas y desdichas.

 

Es que si me dieran un minuto, podria ser conciente por primera vez de que estoy vivo, de que respiro y de que puedo empezar de cero otra vez, de que yo puedo cumplir mis sueños a pesar de los fantasmas y gritarme a mi mismo mientras que soy un reflejo, que soy digno de amar y ser amado.

 

Vivir como si fuera el ultimo dia ya no es algo que se distinga en las calles, si es que alguna vez lo fue, pero podemos empezar por el primer paso, ese que da miedo, bronca, dolor y que aun asi es la puerta de la esperanza que nos lleva a esa felicidad que tanto estamos buscando por distintos lugares, personas, vicios y hasta objetos, ese paso es el hecho de reconocernos y aceptarnos a nosotros mismos, tal como somos, con todo el peso de nuestra historia, con las personas que estuvieron  y que nos marcaron ya sea para bien o para mal.

 

Es el paso que nos invita a poder declararnos amor desinteresado a nosotros mismos, decirnos de frente y mirandonos a los ojos, yo me amo y me acepto con todos los errores que cometi y tambien con todas las cosas que hice bien, me acepto con este dolor y rencor que tengo en mi interior por no poder perdonar lo que en el fondo de mi corazon, aunque no quiera aceptarlo, se que tengo que trabajar, me acepto con mis sueños, me acepto con los padres que me tocaron, con todas las experiencias vividas y las que quisiera haber vivido y quizas no puedan volver a repetirse.

 

Me acepto con todos mis miedos y con todas esas ganas que tengo de enfrentarlos, yo hoy me acepto como soy fisicamente, acepto mis ojos que me permiten apreciar todo lo hermoso que hay a mi alrededor, porque me ayudan a expresar lo que mi alma siente en momentos de felicidad y de tristeza, acepto mi pelo que siento cuando el viento sopla sobre mi rostro, lo acepto porque entiendo que hay personas que no pueden tenerlo por esa enfermedad que tanto daño hace y me doy cuenta que soy un privilegiado/a, acepto mis labios que me dieron la oportunidad de vivir ese primer beso, los acepto porque me regalan lo necesario para gustar de alimentos, porque si tengo la gracia de tener un plato de comida en la mesa todos los dias, acepto mis oidos con las palabras de aliento que me dieron y  tambien con las palabras que me dejaron heridas en el corazon, me acepto por completo.

 

Este paso ademas de regalarnos el reconocimiento y la autoaceptacion, nos regala el perdon a nosotros mismos. Nadie mas puede dar este paso por nosotros, pueden acompañarnos y estrecharnos una mano, pero la decision de cerrar los ojos y en fe decir, yo me animo a dar este paso con miedo y dudas, es solamente decision de uno.

 

Es dificil, pero de ninguna manera es imposible, todo lo que nos propongamos podemos lograrlo. Hay que tratar de hacer oidos sordos a esta cultira de la distraccion y tomarnos un tiempo para nosotros mismos. Dejar de escaparle a eso que tanto nos hace mal, dejar de hacear responsables a otras personas de nuestra felicidad, porque no hay nadie que pueda hacernos mas felices que nosotros mismos.

 

Es tiempo de vivir el momento, de vivir cada segundo de nuestra vida apreciandola como se debe y de entender que estamos en ella por y para algo, que no es casualidad todo por lo que pasamos y estamos pasando. Ojalá algun dia de verdad entendamos que nuestras sonrisas, miradas y actitudes que son expresadas con amor pueden mejorar la circunstancia, el dia e incluso la vida de una persona.

 

 

Dios te bendiga.

                                                                                                 Juan Cruz Marghetich

 

Juan Cruz Marghetich