Se incendia mi corazón al sentir tu presencia, sin poder verte se que estas ahí, en el silencio escucho tu voz que me invita a darte todo de mi, que me pide que me abandone por completa ante ti.
Señor que te encuentras presente en todo momento de mi vida, soy arcilla en tus manos que quiero ser moldeada por el más perfecto artesano.
Tu que conoces mis sueños, debilidades, miedos, alegrías y tristezas has de mi un instrumento de tu reino.
Florencia Belén Riveros