Oración por las mamás y los niños

lunes, 16 de octubre de

Dios y Padre nuestro,

tú sembraste en San Gerardo María Mayela

un amor increíble a tu Hijo Crucificado,

con quien se identificaba,

ayúdanos a seguir siempre tus pasos

y ofrecerte nuestra vida sin guardarnos nada.

A ti te invocamos, Señor de toda vida,

que concediste a san Gerardo,

a lo largo de su corta existencia,

un especial cuidado por la vida naciente y las mujeres embarazadas.

Este rasgo típico de su caridad

constituye para toda la Iglesia un estímulo

a amar, defender y servir siempre a la vida humana.

Bendice, por intercesión de San Gerardo,

a todas las mujeres que esperar un nuevo nacimiento

y a los hijos que llevan sus entrañas,

para que ambos lleguen sanos a un feliz alumbramiento.

Y a toda tu Iglesia dale el don de amar,

anunciar, defender y ofrecer la vida,

que es el mismo Redentor Jesucristo,

que vive y reina por los siglos de los siglos.

 

Amén.

 

Mili Ortiz