Virgen de Candelaria, madre de Dios y madre nuestra,
con toda la devoción y confianza, que un hijo pone en su madre, quiero ofrecerte, hoy, mi persona, mis cosas y mi vida entera.
Acéptalas, madre mía.
Te pido protección para aquellos hijos tuyos, que por circunstancias de la vida, se encuentran fuera de sus hogares, y desde lejos te invocan con sincero corazón.
Dulce Virgen de Candelaria, consuelo de los afligidos y Reina de los hogares cristianos: derrama tu gracia sobre nosotros y sobre nuestras familias: y haz, que sin olvidarnos de Ti, tengamos siempre, salud y paz.
Amén
23/01/2023 – Estamos próximos a cumplir un año del comienzo de la guerra entre Rusia y Ucrania, y Radio…
21/12/2022 – Estando próximos a vivir la Navidad, nos llega el testimonio del Padre Aleksey, director de Radio María Ucrania,…
31/01/2023 – La fe sana, perdona y resucita. En todo encuentro entre la vida y la muerte, vence la vida. Sólo…