Jesús te pido, que cuando se hace más evidente el dolor,
la cuota del desgaste, del cansancio, de lo que supone;
volvamos la mirada a Vos; a Vos que podes renovar nuestras fuerzas,
a Vos que acaricias y suavizas el dolor, a Vos que conoces en lo escondido,
a Vos que valoras cada intento, a Vos que sos de nuestro equipo, y nos sacas adelante.
Es por Vos y sólo por Vos, que salimos adelante; que volvamos nuestra mirada,
nuestra atención a tu dedicación por nuestra vida.
Porque Vos, sólo tenes ojos para nosotros; que te veamos a Vos
que estás empeñado en nuestra felicidad, a Vos el mejor, a Vos que besas y abrazas
cuando todo sale bien y besas y abrazas también cuando nos equivocamos;
volver los ojos a Vos que premias con ternura y penalizas con misericordia, a Vos, mi Señor.
Por. Liliana Cifuentes / Parroquia Nuestra Señora del Perpetuo Socorro Medellín