Evangelio según San Lucas 2,1-14

martes, 24 de diciembre de
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En aquella época apareció un decreto del emperador Augusto, ordenando que se realizara un censo en todo el mundo.Este primer censo tuvo lugar cuando Quirino gobernaba la Siria.Y cada uno iba a inscribirse a su ciudad de origen.

José, que pertenecía a la familia de David, salió de Nazaret, ciudad de Galilea, y se dirigió a Belén de Judea, la ciudad de David,para inscribirse con María, su esposa, que estaba embarazada.Mientras se encontraban en Belén, le llegó el tiempo de ser madre;y María dio a luz a su Hijo primogénito, lo envolvió en pañales y lo acostó en un pesebre, porque no había lugar para ellos en el albergue.

En esa región acampaban unos pastores, que vigilaban por turno sus rebaños durante la noche.De pronto, se les apareció el Angel del Señor y la gloria del Señor los envolvió con su luz. Ellos sintieron un gran temor,pero el Angel les dijo: “No teman, porque les traigo una buena noticia, una gran alegría para todo el pueblo:Hoy, en la ciudad de David, les ha nacido un Salvador, que es el Mesías, el Señor.Y esto les servirá de señal: encontrarán a un niño recién nacido envuelto en pañales y acostado en un pesebre”.

Y junto con el Angel, apareció de pronto una multitud del ejército celestial, que alababa a Dios, diciendo:“¡Gloria a Dios en las alturas, y en la tierra, paz a los hombres amados por él!”.



Palabra de Dios




Monseñor Fernando Maletti Obispo de la Diócesis de Merlo – Moreno


Hermanas y hermanos, queridos jovenes, a lo largo y a lo ancho de la Argentina. Dios llega al hombre, estamos en la víspera de la Noche Buena y de la Navidad. El Evangelio nos presenta la palabra de Dios y que acaba de ser proclamado para todos nosotros nos recuerda que: “Nos visitara el sol que viene de lo alto” es decir, Dios que es luz y vida en Jesucristo, no solo no se olvida de todos y cada uno de nosotros, si no, que nos visita.


Bien sabemos que cuando hay una visita, siempre hay un acordarnos del visitado, como Maria visito a su prima Santa Isabel, como cuando hacemos una visita a un enfermo, a alguien que esta solo, triste, como cuando nos acordamos en navidad por supuesto, pero no solo en este contexto navideño sino todos los dias, de que hay gente que esta sola y nos espera, de que hay gente que sufre, quiere que la vallamos a acompañar y que hay gente que no sabe que rumbo tomar en la vida y necesita un acompañamiento y que, no lo dejemos en soledad.


Hoy también a nosotros, perdidos y a la deriba por el pecado nos visita el sol que nace de lo alto, esta noche buena y esta navidad signifique para todos ustedes saber que Dios esta con nosotros. Y si Dios esta con nosotros, quien estara contra nosotros? La noche buena y la navidad es precisamente abrir el corazon personal, el corazon familiar, el corazon comunitario, el corazon social, a Jesucristo, que es el centro de la noche buena y la navidad.


La Navidad es Jesús, la Navidad es el Señor que nace de una mujer, María nuestra madre y madre de Dios y que es acompañada en su paternidad espiritual por San José, el patrono universal de todos creyentes, el patrono universal de la Iglesia. Dios llega al hombre, esto celebraremos cuando nos podamos reunir con quienes lo hagamos en esta noche y mañana.


Que el Buen Señor nos bendiga y nos acompañe, nos cuide y nos proteja y nos de a cada uno la gracia que mas mecesitemos. Que podamos cantar, noche de paz, noche de amor y que podamos dejar que se transforme nuestro corazon, por la venida, por la llegada del sol que viene de lo alto.


Queridos Muchachos y chicas, renovemos la gran adicción a Jesús, en este dia, en que vamos a celebrar, su venida, su llegada, dejemos de lado todas aquellas adicciones que producen pecado y frustracion que llevan a la muerte, y abrazemonos fuertemente mirando el pesebre que tenemos en nuestras casas o que estan en nuestrs templos y todavia gracias a Dios, en alguns lugares de la via publica y contemplando ese cuadro maravilloso de la noche buena y la navidad que es el pesebre de Belén, decirle a Jesús:


Señor, gracias por visitarnos, gracias por iluminarnos, gracias por caminar con nosotros, porque si cada día es Navidad, si cada día nace Dios, nace la paz al corazón que sabe abrirse a los demas.


Los bendigo a todos ustedes queridos oyentes en los umbrales de Noche Buena y Navidad, y a todo s ustedes queridos jóvenes, para que no se dejen llevar por vientos que llevan a no sentirnos en paz, sino por todo aquello que nos llena el corazón, de amor y vida y eso se llama Jesús. En el Nombre del Padre, del Hijo y del Espiritu Santo. Amén.




 

Oleada Joven