Evangelio según San Juan 11,45-57

domingo, 6 de abril de
image_pdfimage_print

 

Al ver lo que hizo Jesús, muchos de los judíos que habían ido a casa de María creyeron en él. Pero otros fueron a ver a los fariseos y les contaron lo que Jesús había hecho. Los sumos sacerdotes y los fariseos convocaron un Consejo y dijeron: “¿Qué hacemos? Porque este hombre realiza muchos signos. Si lo dejamos seguir así, todos creerán en él, y los romanos vendrán y destruirán nuestro Lugar santo y nuestra nación”.

Uno de ellos, llamado Caifás, que era Sumo Sacerdote ese año, les dijo: “Ustedes no comprenden nada. ¿No les parece preferible que un solo hombre muera por el pueblo y no que perezca la nación entera?”. No dijo eso por sí mismo, sino que profetizó como Sumo Sacerdote que Jesús iba a morir por la nación, y no solamente por la nación, sino también para congregar en la unidad a los hijos de Dios que estaban dispersos.

A partir de ese día, resolvieron que debían matar a Jesús. Por eso él no se mostraba más en público entre los judíos, sino que fue a una región próxima al desierto, a una ciudad llamada Efraím, y allí permaneció con sus discípulos.

Como se acercaba la Pascua de los judíos, mucha gente de la región había subido a Jerusalén para purificarse. Buscaban a Jesús y se decían unos a otros en el Templo: “¿Qué les parece, vendrá a la fiesta o no?”.

 

Los sumos sacerdotes y los fariseos habían dado orden de que si alguno conocía el lugar donde él se encontraba, lo hiciera saber para detenerlo.


 

Palabra de Dios



 


 

P. Nicolás Retes


Compartimos hoy Sábado 12 de Abril el Evangelio del día, tomado de San Juan, Cap.11 de los Versículos 45-57.

Después de ver todos los signos que Jesús realizaba, la multitud comienza a preguntarse ¿Quién es esté? Signos que realiza Jesús, justamente para que creamos que, Él es  Hijo de Dios. Pero, no solo la multitud tiene puesto sus ojos sobre el Maestro, también los Fariseos.

El evangelio de hoy nos presenta una discusión que se da entre los distintos fariseos y sus jefes, digamos, el Sumo Sacerdote llamado Caífas, que termino profetizando. Por que dice algo que es verdad, algo que va a suceder. Sus palabras son: “Es preferible que un solo Hombre muera por todo el pueblo, antes que parezca la Nacion entera”. Y esto es lo que ocurre, Jesús, va a entregar su vida voluntariamente para la salvación de su pueblo, de su nación y de todo el mundo entero. Con su muerte nos trae la Vida Eterna, la resurrección. Este es el misterio central que estamos celebrando en este tiempo, ya de Cuaresma que termina y la Pascua que se acerca.

En la época de Jesús, también se acercaba la Pascua, los Judíos. Celebraban el paso por el desierto y después la liberación, justamente de Egipto al pasar el Mar Rojo. Esa noche tan gloriosa en la cual logran liberarse con la ayuda del Señor de sus perseguidores. Bueno, este tipo de celebraciones que duraban un tiempo, o había que acercarse a Jerusalén, había que subir hacía allí, es lo que nos presenta el evangelio hoy. Esta pregunta ¿Si Jesús realmente se va acercar a celebrar “La Pascua”allí, o no, o si va a ir al templo? Por que esta pregunta, por que lo querian apesar de  los fariseos justamente querían meterlo preso a Jesús, porque con sus signos, su gestos, con su predicacion causaba revuelo en toda la población, alguno para un lado a favor de Él, otros en contra, otros se escandalizaban, en fin. Esta pregunta de que si Jesús va a concurrir al templo de Jerusalén, la encontramos respondida mas adelante por supuesto. Es el protagonista de la nueva Pascua, de esta nueva alianza, es el cordero que se va a inbolar y con su sangre va a salvar al mundo. Esta pregunta es como una Posta, pasa a nosotros y sería de este modo a participar de esta Pascua del año 2014 que nos regala el Señor.

Hay distintas formas de participar, estamos hablando de una participación conciente, con ganas, con intención, con una actitud realmente de querer hacer pasar con el corazón lo que ocurrio en la época de Jesús, hacer memoria, que es tan sano para nuestra vida Espiritualidad.

Por eso la invitación especialmente a los Jóvenes. Hay muchas formas de participar de una Pascua, pero hay tres formas tradicionales. La Primera es, participar de lo que se llama “La Pascua Joven”, es decir,asistir a parroquias o colegios que realicen este tipo de actividad en la Argentina a lo largo de nuestro país se realizan en muchos lugares. Son encuentros con cantos, donde se comparten experiencias, se reza juntos y por supuesto como deciamos recién, se hace memoria de todo lo que se vivio en aquel momento en la época de Jesús hace 2000años, la Pascua Joven.

Otra posibilidad mas simple es concurrir como lo que hacemos siempre ordinariamente a las Parroquias a celebrar allí este acontecimiento, de hacer memoria de todo lo que ocurrio hace 2000años, atravez de las distintas celebraciones que ofrece la Iglesia Católica en esta semana tan importante. Finalmente otra forma interesante de participar es atravez de una “Misión”. Muchas parroquias ofrecen la posibilidad de ir con un Sacerdote, misionar en algún lugar, ofrecer algún servicio en alguna periferia, en algún lugar necesitado y por su puesto celebrar allí junto al pueblo de Dios, la Pascua.

Este también tiene un hermoso sentido, porque no solo esta lo celebrativo, sino también, la parte misionera, la parte de salir que nos pide el Papa Francisco.

Sea cual sea tu forma de participar, la invitación que Yo te hago es, a que no dejes pasar esta Pascua, que realmente te comprometas y busques entonces, disfrutar de lo que Jesús te quiere regalar en este tiempo de gracia.

Te deseo una excelente Semana Santa.

 

 

Oleada Joven