A ti, Señor, levanto mi alma;Dios mío, en ti confío, no quede yo defraudado.(…) Señor, enséñame tus caminos,instrúyeme en tus sendas:haz que camine con lealtad;enséñame, porque tú eres mi Dios y Salvador,y todo el día te estoy esperando.
Recuerda, Señor, que tu ternuray tu misericordia son eternas;no te acuerdes de los pecadosni de las maldades de mi juventud;acuérdate de mí con misericordia,por tu bondad, Señor.
El Señor es bueno y es recto,y enseña el camino a los pecadores;hace caminar a los humildes con rectitud,enseña su camino a los humildes.Las sendas del Señor son misericordia y lealtadpara los que guardan su alianza y sus mandatos.Por el honor de tu nombre, Señor,perdona mis culpas, que son muchas.
Salmo 24