Este es mi mandamiento: Amense los unos a los otros, como yo los he amado.No hay amor más grande que dar la vida por los amigos. Ustedes son mis amigos si hacen lo que yo les mando. Ya no los llamo servidores, porque el servidor ignora lo que hace su señor; yo los llamo amigos, porque les he dado a conocer todo lo que oí de mi Padre.
No son ustedes los que me eligieron a mí, sino yo el que los elegí a ustedes, y los destiné para que vayan y den fruto, y ese fruto sea duradero. Así todo lo que pidan al Padre en mi Nombre, él se lo concederá. Lo que yo les mando es que se amen los unos a los otros.
Palabra de Dios
P. Gustavo Gatto Asesor de la Pastoral Juvenil de la Diócesis de Villa María
¡Hola queridos amigos y amigas de la Oleada Joven! Hoy nos encontramos con un relato del Evangelio que sin dudas lo leemos a la luz de la Pascua pero que tiene su contexto en la última cena.
¡Cuanta densidad en este pequeño relato del Evangelio! ¡Cuantas palabras e ideas fuertes! como por ejemplo: amor, amor extremo, dar la vida, amigos, secretos, intimidad, elección, destino, frutos, fecundidad.
La invitación es que algunas de estas palabras hagan eco en tu corazón, son palabras pascuales, somos sus amigos, mi vida vale su vida. Él me ha contado los secretos de su corazón, ¿yo les cuento los míos? me ha elegido, pensó para mí una vida fecunda, este es mi destino, pero sin dudas me ha hecho libre. ¡Que tengas una buena semana!