Refundar la Patria desde el encuentro

viernes, 24 de mayo de
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El Papa Francisco, antes Cardenal Jorge Mario Bergoglio, como primado de la Argentina y Presidente de la Conferencia Episcopal durante dos períodos, tuvo muchas expresiones en torno a la construcción de la Patria. En sus palabras se reflejó siempre la necesidad que tenemos los argentinos de un diálogo maduro, de reconciliación, de generar espacios de encuentro, de mirar juntos a una misma dirección y recuperar la esperanza.


Ante la dolorosa situación que estamos atravesando como nación, te proponemos reflexionar en torno a la Patria, orar juntos por ella, pidiendo la gracia al Señor de acordar en lo fundamental para poder construir juntos la Argentina que soñamos.

 

Nosotros somos invitados a refundarnos en la soberanía del amor simple y profundo, del amor que hoy escuchamos en el Evangelio, mandamiento que anuda el amor de Cristo y de Dios Padre en los vínculos y la dignidad de los otros amados como “a nosotros mismos”. (…) Esta fecha (…) es un momento propicio para detenernos y preguntarnos por “el corazón, el alma, el espíritu y las fuerzas” de nuestro amor ciudadano y familiar. Ese amor que nos enseña a vivir bien y ayudar en el crecimiento de los otros, que son como nosotros, que merecen el amor como nosotros por ser personas y compatriotas. Ningún sistema o ideología asegura por sí mismo este cuidadoso y justo trabajo político del bien de los otros, de todos nosotros. Para ello hace falta vivir el amor como don preciado e invocado, que inspira la ética y el sacrificio, la prudencia y la decisión. Entonces, ante este mandamiento que pide todas nuestras fuerzas, ante este don que ayuda a fundar nuestra conciencia cívica y política más honda y que, sobre todo, pide un corazón noble, nos hará bien hoy, con coraje genuino, hacer un examen de conciencia y preguntarnos en concreto sobre una realidad cotidiana que precisamente es lo contrario al amor, es consecuencia del desamor: ¿qué nos lleva a ser cómplices, con nuestra indiferencia, de las manifestaciones de abandono y desprecio hacia los más débiles de la sociedad?. (Cardenal Bergoglio, durante el Te Deum del 25 de mayo del 2012)

 

“La Patria florece cuando vemos ‘en el trono a la noble igualdad’, como bien dice nuestro himno nacional. La injusticia en cambio lo ensombrece todo. Qué triste es cuando uno ve que podría alcanzar perfectamente para todos y resulta que no”. (Homilía de Card. Bergoglio por la misa de San Cayetano, agosto de 2012)

 

 

 

 

 

Oración por la Patria

 

 

Jesucristo, Señor de la historia, te necesitamos.

Nos sentimos heridos y agobiados.

Precisamos tu alivio y fortaleza.

Queremos ser nación,

una nación cuya identidad

sea la pasión por la verdad

y el compromiso por el bien común.

Danos la valentía de la libertad

de los hijos de Dios

para amar a todos sin excluir a nadie,

privilegiando a los pobres

y perdonando a los que nos ofenden,

aborreciendo el odio y construyendo la paz.

Concédenos la sabiduría del diálogo

y la alegría de la esperanza que no defrauda.

Tú nos convocas. Aquí estamos, Señor,

cercanos a María, que desde Luján nos dice:

¡Argentina! ¡Canta y camina!

Jesucristo, Señor de la historia, te necesitamos.

Amén.

 

 

Oleada Joven