Señor, estoy cansado,
parece que mi lista de cosas pendientes
se hace más grande cada día.
El frenesí en mi rutina se esta volviendo incontrolable.
Las fiestas están tocando nuestras puertas y yo me estoy retrasando.
Ayúdame, Jesús.
Déjame sentir tus amados brazos que me estrechan firmemente
en el cálido abrazo de tu inmenso amor.
Enséñame a hacer elecciones sobre mi tiempo,
a recordar qué es importante en este tiempo,
decir No cuando mi Sí puede llevarme lejos de tu paz.
Lléname de paciencia, amor y sentido del humor.
Hazme recordar tu profundo amor por mí
y haz que este fuego de tu amor
pueda compartirlo con aquellos que están alrededor mío.
Amén