Evangelio según San Marcos 3,20-21

viernes, 20 de enero de
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Jesús regresó a la casa, y de nuevo se juntó tanta gente que ni siquiera podían comer. 

Cuando sus parientes se enteraron, salieron para llevárselo, porque decían: “Está fuera de sí”. 

 

Palabra de Dios

 

 


 

P. Gustavo Gatto sacerdote de la Diócesis de Villa María

 

 

Evangelio de Marcos

Jesús vuelve a su casa, se agromera otra vez la muchedumbre de modo que no podían comer, se enteraron sus parientes y se hicieron cargo de él, decían: esta fuera de sí.

Una de las constantes del evangelio de Marcos es mostrar que la familia de Jesús no está hecha en la sangre, sino en la fe.

Sus verdaderos hermanos son los que escuchan la palabra de Dios y la ponen en práctica.

La incomprensión más grande que tiene Jesús en el evangelio de Marcos, es de su propia familia y quizás las que están aparentemente más lejos son los que lo reconocen como el Señor.

De hecho así termina el evangelio en boca de un pagano:

“Verdaderamente este hombre es el Hijo de Dios”

¡Que tengas un hermoso fin de semana!

 

Oleada Joven