Jaden Hayes, Winterville, Georgia EEUU, perdió a su papá a los 4 años y al poco tiempo también a su mamá. Durante su funeral, le dijo, Barbara DiCola, quien estaría a cargo de él a partir de ese momento, que estaba cansado de ver todo el tiempo triste a la gente y que quería hacer algo para modificar esto.
Para lograrlo, lo primero que hizo fue juntar muchos juguetes para regalarlos en el centro de la ciudad. Su meta: hacer sonreír a las personas que no estuvieran sonriendo. Fue así que su pequeño experimento funcionó, recibió muchos abrazos y afecto como forma de pago.
Obviamente, la muerte de sus apdres habían dejado en él mucha tristeza, pero encontró un nuevo propósito en las sonrisas que había logrado conseguir. Ahora Jaden tiene 6 años y vive con sus tíos Scott y Diana Hollars.
Su mayor meta: conseguir “33.000 sonrisas algún día”