Muchos judíos habían ido a consolar a Marta y a María, por la muerte de su hermano. Al enterarse de que Jesús llegaba, Marta salió a su encuentro, mientras María permanecía en la casa.
Marta dijo a Jesús: “Señor, si hubieras estado aquí, mi hermano no habría muerto. Pero yo sé que aun ahora, Dios te concederá todo lo que le pidas”. Jesús le dijo: “Tu hermano resucitará”.Marta le respondió: “Sé que resucitará en la resurrección del último día”.
Jesús le dijo: “Yo soy la Resurrección y la Vida. El que cree en mí, aunque muera, vivirá;y todo el que vive y cree en mí, no morirá jamás. ¿Crees esto?”. Ella le respondió: “Sí, Señor, creo que tú eres el Mesías, el Hijo de Dios, el que debía venir al mundo”.
Palabra de Dios
P. Nicolás Retes
Queridos amigos de oleada joven el evangelio según san Juan que acabamos de escuchar de este viernes 29 de julio nos presenta el tema de la resurrección, Jesucristo como la resurrección y la vida. Este planteo que le hacen a Jesús: “Señor si hubieras estado aquí mi hermano no habría muerto”, es verdad, cuando está Jesús en el medio de nuestra vida todo florece: hay luz, hay resurrección, hay esperanza. Por el contrario, que distinta es nuestra vida cuando nos alejamos de Dios, cuando no escuchamos sus palabras, cuando ya no rezamos. Cuando ya no creemos en esta promesa que nos ha hecho que es la resurrección, promesa vital,clave para todo cristiano.
La resurrección ilumina nuestras vidas, esta promesa nos permite seguir caminando con esperanza cada día.
“Señor, si hubieras estado aquí…” Jesús siempre está con nosotros, está en el corazón, está desde el día del bautismo, la Trinidad toda vive con nosotros en lo profundo, alimenta nuestra conciencia, no acompaña en cada paso que vamos realizando.
Jesús nos invita siempre algo más grande, el Espíritu Santo nos acompaña y nos va indicando cual es el camino que tenemos seguir si somos dóciles, si nos dejamos acompañar, si leemos su palabra podemos encontrar allí la voluntad de Dios.
El evangelio de este viernes 29 nos invita a reafirmar nuestra fe en Jesucristo como el camino, como la resurrección, como la vida.
Cuando está Jesús en medio nuestro somos capaces de hacer cosas muy grandes, cuando está Jesús en medio nuestro nunca nos va a faltar la esperanza.
Tengamos un corazón grande,decidido, convencido de poder llevar esta alegría de la buena noticia a otros que no lo conocen a Jesús o que quizás se han alejado de la iglesia católica.
Que lindo es poder compartir esta fe que hemos recibido desde el día del bautismo, que hemos vuelto a decir que sí en la confirmación, vale decir, que hemos confirmado nuestra fe.
Nuestra tarea es misionar, anunciar a otros lo que Dios ha hecho en nuestras vidas.