Evangelio según San Mateo 9, 9-13

martes, 20 de septiembre de
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Jesús, al pasar, vio a un hombre llamado Mateo, que estaba sentado a la mesa de recaudación de impuestos, y le dijo: “Sígueme”. El se levantó y lo siguió. Mientras Jesús estaba comiendo en la casa, acudieron muchos publicanos y pecadores, y se sentaron a comer con él y sus discípulos.

 

Al ver esto, los fariseos dijeron a los discípulos: “¿Por qué su Maestro come con publicanos y pecadores?”. Jesús, que había oído, respondió: “No son los sanos los que tienen necesidad del médico, sino los enfermos.

 

Vayan y aprendan qué significa: Yo quiero misericordia y no sacrificios. Porque yo no he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores”.

 

 

Palabra de Dios

 

 

 

En el día de la primavera es el día de uno de los apóstoles de Jesús. El día de san Mateo y por ello meditamos este evangelio, donde se desarrolla el encuentro entre Jesús y Mateo, seguramente un día inolvidable, un día que quedó muy marcado muy grabado en la vida de Mateo.

 

 

Sabemos que en nuestras vidas, aquellos acontecimientos muy fuertes que hemos vivido, están bien impresos en el corazón de uno. Alguno de esos acontecimientos nos marcaron tanto que podemos decir, que a partir de aquel, hay un antes y un después en nuestras vidas.

 

 

Para Mateo el encuentro con Jesús marco un antes y un después en su vida.

 

Un Antes en la vida de Mateo donde Jesús no estaba ¿Cómo hubiera sido la vida de Mateo, sin Jesús? ¿Cómo es la vida sin Jesús?.

 

 

Y llega el encuentro con Jesús y desde ahí viene un Después en la vida de Mateo, donde Jesús está Presente, donde Jesús empieza a vivir, un después donde mateo empieza a caminar con Jesús.

 

 

¿Cómo habrá sido la vida después del encuentro con Jesús? ¡como en la vida cuando se la vive con Jesús! Fue un acontecimiento muy fuerte para la vida de Mateo ¿Qué habrá pasado en el corazón de Mateo, que llego hasta tal punto de dejarlo todo para seguirlo? Ojalá que cada uno de nosotros, podamos hacer memoria de ese momento tan importante que tuvimos cuando nos encontramos con Jesús.

 

 

Que como Mateo, sea un antes y un después en nuestras vidas, que el  después de nuestras vidas fue en la vida de Mateo, CAMINAR Y ESTAR PARA SIEMPRE CON JESÚS.

 

 

Un abrazo grande en el día de San Mateo. Y feliz Primavera un abrazo grande y Bendiciones para todos!

 

 

 

 

Radio Maria Argentina