Señor Jesús, estoy necesitada…
Por eso vengo ante tu sacratísimo corazón para que me regales lo que quieras.
Estoy ansiosa y tengo miedo ante lo que cada día voy viviendo; Necesito paz, confianza, serenidad y templanza.
Ante tu presencia, puedo contemplar tu corazón amante y desde él, ver el amor sincero y puro por mí y por cada persona en el mundo.
Te suplico, Señor, me regales lo que quieras, lo aceptaré, porque Vos siempre me vas a dar lo que más necesito, me conoces más que yo misma.
Señor Jesús, estoy necesita de tu mirada, de tu caricia, de tus palabras.
Señor Jesús, estoy necesitada de tu Amor.
Confío, creo y espero… pero ante tu corazón, te ruego, animándome a pedirte más, que me regales la fe, para que cada día pueda confiar, creer y esperar al rezar: ¡Sagrado Corazón de Jesús, en Vos confío!
Amén.
Carolina Lizárraga, SSpS