¿Te agradezco el contraste de mis luces y mis sombras?
¿Sé agradecerte que la vida no se ajuste a mis planes, más allá de lo bueno que estos me parezcan?
¿Cómo acojo la vida que es?
¿Te agradezco el Misterio?
¿O me empeño en reducirte al intentar atraparte?
Ojalá sepa, Señor, entre tanto paso errante, caminar serena y mansa a tu compás abrazando lo que la vida trae a cada momento. Ojalá que sepa reconocerte y dejarme guiar.
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