25/04/2019 – A días de la Beatificación del obispo mártir Enrique Angelelli y de sus compañeros Carlos de Dios Murias, Gabriel Longueville y Wanceslao Perdernera, artistas argentinos se reunieron para rendirles un homenaje.
El Padre César Scicchitano Tagle, el cura rockero, compuso la letra y melodía e invitó a músicos de diferentes ámbitos a participar. Entre ellos, estuvieron Peteco Carabajal, Axel, el Cóndor de la Bersuite, Yamila Cafrune, Juanse, Willy de Los Tipitos, Piero, Ignacio Copani, Manuel Wirtz, Analía de la banda rockera Seda Carmín, Barby Corvalán y la Bruja Salguero.
El alma del pastor con olor a oveja,
bien de la tierra y bien de tierra adentro.
Olor a obrero, olor a hachero, y a mujer maltratada.
Olor a pueblo, por liberar y salvar.
Las alas del pastor con vuelo libre,
no estar atado a ningún poder le abrió los brazos.
Para volar, para nacer después de su muerte.
Sangra valiente, sangre decente que no morirá.
Sangre derramada por amor,
sangre del martirio y la flor.
Sangre destinada a sembrar,
memoria, justicia y paz.
Los pasos del pastor junto a su pueblo,
cuidándolos del lobo con piel de cordero.
Los que fomentan mano de obra barata y mal paga,
esos que vienen para humillar nuestra dignidad.
El oído del pastor al evangelio
el otro oído para escuchar al pueblo.
Para salir a reclamar nuestros derechos,
no hay que parar,
hay que seguir andando nomás.
La sangre de los mártires riojanos,
que han puesto el pecho a las balas de afuera y de adentro.
La de Angelelli, la de Gabriel, Carlos y Wanceslao.
Sangre en el barro y hay que seguir andando nomás.
Hay que seguir andando nomás.