11/01/2019 – Para rezar con confianza, cuantas veces sea necesario.
Señor Jesús, humildemente hoy me postro ante Vos.
Te pido con sencillez que vengas a mi vida.
Dejo en tus manos mis problemas y preocupaciones,
y me abandono a tu amor
“Si quieres, puedes sanarme”.
Saname de mis culpas (y de las que pongo en los demás).
Saname de mis dolores, los que veo, y los que sufro sin saberlo.
Saname de mis tristezas, de las que no puede ni ponerle nombre.
Saname de mis violencias, que me avergüenzan.
Saname de mis indiferencias, de mi no involucrarme.
Saname, Señor, de mis egoísmos.
Si quieres Señor…
Saname, por tu amor.