Una verdadera amistad

lunes, 15 de julio de
image_pdfimage_print

Cuando conoces una verdadera amistad, te maravillas.

Cuando conoces una verdadera amistad, experimentas el primer sabor al verdadero Amor.

Cuando conoces una verdadera amistad se vuelve natural esto de dar sin esperar algo a cambio.

Cuando conoces una verdadera amistad, tu vida no gira en torno a ella, más bien te lanza hacia los demás.

Cuando conoces una verdadera amistad, te vuelves sincera y desinteresada.

Cuando conoces una verdadera amistad, no te vuelves dependiente, mas te independizas.

Cuando conoces una verdadera amistad, no estás preocupada por cómo actúas, pues sabes que ser tú misma ya satisface la expectativa del otro.

Cuando conoces una verdadera amistad, mostrarte vulnerable no es debilidad, más bien es un regalo preciado que le haces al otro.

Cuando conoces una verdadera amistad, verás crecimiento, no estancamiento.

Cuando conoces una verdadera amistad, te inspiras a igualmente ser una verdadera amistad.

Cuando conoces una verdadera amistad, tienes un encuentro cercano con Cristo.

 

Adriana Sepúlveda