El Riachuelo, una contaminación que parece imparable

03/04/2019 – La contaminación afecta a 5 millones y medio de habitantes, entre los cuales casi 4 de cada 10 no tienen agua potable, y más de la mitad no posee cloacas.

La historia de la contaminación del Riachuelo es muy antigua. La responsabilidad les cabe a los funcionarios del Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, de la provincia de Buenos Aires, de una gran cantidad de municipios que lo bordean y de la Nación.

Cada día, el Riachuelo recibe casi 90 mil metros cúbicos de desechos industriales de muchas de las fábricas instaladas en sus márgenes. En toda la Cuenca hay 13.000 establecimientos industriales. De ese total, 1.397 establecimientos han sido declarados agentes contaminantes.

A esos afluentes químicos se les suman 368.000 metros cúbicos de aguas servidas por día, de las cuales – según algunos organismos controladores- sólo 5 por ciento recibe tratamiento específico.

Allá por el año 2006 se creó la Autoridad de Cuenca Matanza-Riachuelo (ACUMAR), que es el ente interjurisdiccional de derecho público que tiene a su cargo la ejecución del Plan Integral de Saneamiento Ambiental de la Cuenca del Río Matanza-Riachuelo.

Nicolás Bardella, es director general Ambiental de ACUMAR y, en diálogo con Radio María Argentina explicó: “Identificamos 3 problemas generales en la cuenca del Riachuelo: afluentes cloacales, residuos sólidos urbanos e industrias. El principal contaminante del río es la falta de cloacas”.

A lo largo de la Cuenca del Riachuelo hay más de 100 basurales a cielo abierto y el agua tiene niveles de mercurio, zinc, plomo y cromo de hasta 50 veces más altos de lo permitido, un agua que es usada por los habitantes de por lo menos 13 villas de emergencia que están instaladas en la parte baja del río.

Al respecto, Bardella aseguró que “se están haciendo varias obras sanitarias cloacales y se están dando distintos tipos de ayudas para que los vecinos puedan conectarse a la red cloacal”.

Andrés Napoli, es titular de la “fundación Ambiente y Recursos Naturales” e integrante del Cuerpo Colegiado establecido por la Corte Suprema de Justicia de la Nación que tiene a su cargo el control del Plan de Saneamiento del Riachuelo.

En contacto con nuestra emisora, Napoli aseguró: “El volumen de contaminantes industriales es el más tóxico. ACUMAR tiene un defecto muy grande en el control de las industrias que vierten sus residuos en el Riachuelo”.