El Papa Francisco aseguró que “Dios nos sostiene en las dificultades”

lunes, 9 de mayo de 2022
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09/05/2022 – En el rezo del Regina Caeli del IV Domingo de Pascua, en el que se celebró la Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones, el Papa Francisco reflexionó acerca del Evangelio de San Juan, el cual “nos habla del vínculo que hay entre el Señor y cada uno de nosotros”.

A partir de esta lectura, el Papa destacó tres verbos: escuchar, conocer y seguir.

Escuchar
En primer lugar destacó la importancia de la escucha, y aseguró que la comunión entre Dios y sus ovejas solamente ocurre “si nos abrimos a la escucha”.

“Hoy estamos abrumados por las palabras y por la prisa de tener que decir o hacer algo siempre. ¡Cuánto cuesta escucharse! ¡En la familia, en la escuela, en el trabajo, incluso en la Iglesia!”, exclamó el Papa Francisco.

Además, el Papa animó a los fieles a preguntarse “si somos hijos de la escucha, si encontramos tiempo para la Palabra de Dios, si damos espacio y atención a los hermanos y hermanas”.

Conocer
A continuación, el Papa aseguró que “escuchar a Jesús se convierte así en el camino para descubrir que Él nos conoce”.

“Este es el segundo verbo, que se refiere al buen pastor: Él conoce a sus ovejas. Pero esto no significa sólo que sabe muchas cosas sobre nosotros: conocer en sentido bíblico quiere decir amar”, explicó.

El Papa aseguró que si escuchamos al Señor descubrimos que Él nos ama, llegando a tener una relación “que ya no será impersonal, fría o de fachada”.

“Quiere donarnos un conocimiento nuevo y maravilloso: el de sabernos siempre amados por Él y por tanto nunca dejados solos a nosotros mismos”, aseguró.

“Sobre todo en los sufrimientos, en las fatigas, en las crisis: Él nos sostiene atravesándolas con nosotros. Y así, precisamente en las situaciones difíciles, podemos descubrir ser conocidos y amados por el Señor”, señaló el Santo Padre.

Seguir
El Papa Francisco concluyó diciendo que el buen pastor “va a buscar a quien está perdido (cfr Lc 15,4), se interesa por quien está lejos, se toma en serio las situaciones de quien sufre, sabe llorar con quien llora, tiende la mano al prójimo, se lo carga sobre los hombros”.

“ ¿Y yo? ¿Me dejo solo amar por Jesús o paso del amarlo al imitarlo? La Virgen Santa nos ayude a escuchar a Cristo, a conocerlo cada vez más y a seguirlo en el camino del servicio”, pidió por último el Papa Francisco.