29/06/2022 – Continuando con la Obra del Hogar de Cristo en Argentina, Myriam Francisquini, coordinadora del centro barrial San José y voluntaria del refugio Gabriel Brochero de la ciudad de Neuquén, compartió de qué forma trabajan en esa capital provincial. El refugio aloja a personas en situación de calle desde los 18 a los 80 años. También hablamos con Ana Montes de Oca, voluntaria de la obra en Neuquén y acompañante terapéutica. “Yo llegueé desde otro Hogar de Cristo, el que está ubicado en Río Gallegos, en la provincia de Santa CRuz. Esto lo hago como persona recuperada que soy desde hace 17 años. Ahora estoy devolviendo lo que recibí en mi proceso”, expresó Ana.
“El refugio Gabriel Brochero fue fundado por el padre Carlos Diur en junio del año 2017, funcionaba anteriormente en la parroquia Inmaculada Concepcion de la ciudad de Neuquén. Al principio se alojaban a 8 hombres en situación de calle, luego llegaron a ser 20 hombres. En el 2019 el obispado de Neuquén cedió en calidad de préstamo un edifico ubicado en Echeverria 140 y el refugio se trasladó a ese lugar del sur de la capital provincial. En el 2018 se crea el centro barrial, que ya funcionaba en la parroquia Virgen de Lourdes, y luego ambas instituciones comienzan a funcionar en la sede de la calle Echeverria”, destacó.
“El centro barrial tiene como objetivo central acompañar a los hombres que viven en el refugio que, en su mayoría, tienen consumos problemáticos de alcohol y drogas. Es un espacio alternativo de día, allí se pone énfasis en los vínculos que se tejen, y nos hacen comunidad, la solidaridad, la hospitalidad, el cuidado y la paciencia. Se desarrollan diferentes talleres de artística, educación física, consumo problemático, catequesis, apoyo escolar, psicología deportiva. En este último se trabaja la convivencia a través de fútbol callejero, siendo un taller del área Proyecto de Vida. También acompañamos la reinserción social y productiva de los pibes y su escolaridad”, manifestó Francisquini.