16/09/2022 – En el espacio de actualidad que compartimos hoy, les invitamos a que presten mucha atención a los datos que aparecen en el audio de la entrevista.
En este tiempo, cada vez se hace más evidente la necesidad de diálogo, de consenso, de armonía y de paz en Argentina y en el mundo. Porque advertimos, por distintos hechos y circunstancias, que vivimos en un contexto de mucha violencia, de polarización y de enfrentamiento que impide o reduce las posibilidades de diálogo personal, social, democrático, y el consenso; polarización que obstaculiza el entendimiento, la aceptación y la convivencia entre los distintos. Un fenómeno que parece ser epocal, es decir, que parece ser un signo de esta época, un “signo de los tiempos” que tenemos que discernir para conocer, entender y, en la medida de nuestras posibilidades, intentar cambiar para mejorar la convivencia en todos sus órdenes…
Hoy sumamos, a todo lo que venimos planteando en estos últimos programas, una aproximación al problema desde las ciencias sociales, y lo vamos a hacer con una investigadora, Micaela Cuesta, que es Doctora en Ciencias Sociales por la UBA, magíster en “Comunicación y Cultura”, y licenciada en Sociología por la misma universidad. Que desarrolla sus actividades de docencia e investigación en la Escuela IDAES de la UNSAM y en la carrera de sociología de la Universidad de Buenos Aires. Es coordinadora del Laboratorio de Estudios sobre Democracia y Autoritarismos, y que forma parte del grupo de investigación del Conicet que elaboró un amplísimo estudio sobre “Discursos de odio en la sociedad argentina”, un estudio dirigido por el doctor Ezequiel Ipar, que indagó cuán propensos somos las y los argentinos a reproducir o promover en la esfera pública enunciados que promueven el odio, la discriminación, la deshumanización de las personas con distintas identidades sociales; y le vamos a preguntar cuánto de esto impacta en nuestra vida privada y, sobre todo, en la convivencia social y política que, nos guste o no, nos incluye a todos.
La doctora en Ciencias Sociales, Micaela Cuesta, nos contó cómo realizaron la encuesta que arrojó entre los alarmantes datos presentados, que “el 30% de los ciudadanos aprueban o promueven discursos de odio” o con alto contenido de odio. La profesional, miembro del equipo que realizó este trabajo, también señaló que estas “narrativas de violencia” parecen “ser rentables para ciertas plataformas”. A su vez sostuvo que “esto es un problema de la sociedad” más que de la política.