En cada persona privada de la libertad, existe un llamado de esperanza

jueves, 14 de marzo de 2019

14/03/2019 El equipo de la pastoral carcelaria a nivel nacional, se suma a la apuesta de este año 2019 y renueva el espacio de ciclo los jueves por la tarde. La temática está tiene como objetivo profundizar y visibilizar a los distintos protagonistas del mundo de la carcelación y el compromiso que cada uno de estos sostienen en pos de la dignidad del hombre.

Este jueves las voces que le dieron sentido a la tarde a través del testimonio son las de: Claudia Erro coordinadora de la pastoral en el sector Patagonia, y Elisa Eugenia Brito Directora de política de Género de la Municipalidad de Río Gallegos. La unión entre Estado, Cárcel e Iglesia se vuelve testimonio en esta zona de nuestro país dando lugar a nuevas posibilidades para las mujeres que pertenecen al anexo 3 de la cárcel de Río Gallegos.

En referencia al vínculo y a la mirada necesaria en la tarea y en la misión, Claudia se detiene en la biografía y la historia que es necesario conocer para abrazar la vida que se acompaña: “Hay un mundo previo en cada una de ellas, es decir todo lo que implica la vida y la familia; antes de ser personas privadas de la libertad, muchas fueron víctimas de diferentes circunstancias vividas en familia”.

Con respecto al trabajo pastoral, la coordinadora del área Patagonia agregó: “Trato de que en cada lugar de la diócesis que comprende Santa Cruz y Tierra de fuego, pueda abrirse una pastoral que trabaje desde y en el mundo de la carcelacion; que trabaje con la familia, con los penitenciarios, con las víctimas. En la vida ellas tantas personas les han fallado que les cuesta abrirse y la idea frente a eso es motivarlas a creer a participar y seguir el proceso”.

En torno al vínculo con el municipio local, Elisa desde su labor en la tarea frente a la Dirección de políticas de género, nos compartió: “en el municipio surgió la necesidad de trabajar con mujeres en contextos de encierro, comenzamos este trabajo de acercamiento dando lugar a las visitas para conocer la situación en torno a los derechos humanos son vulnerados”. Para la responsable del área estatal se trata de seguir un proceso como camino fundamental para lograr una salida concreta y una reinserción social: “La búsqueda es reinsertarlas, nos planteamos realizar conjuntamente con la pastoral los talleres de oficios, como así también espacios de charlas sobre violencia de género y derechos. Las mujeres requieren de un oficio para tener un trabajo al momento de la salida, y en eso nos apoyamos en la iglesia”.