La roca

jueves, 5 de julio de 2012
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Las rocas, por su solidez e inmutabilidad, evocan las ideas de cohesión, respaldo, seguridad, firmeza y eternidad. Dios mismo es llamado “la roca” porque da firmeza a los que se apoyan en él. En hebreo, el verbo “tener fe, creer”, significa “afirmarse”, de modo que la imagen de la roca es correlativa a este verbo (Gén 49,24, Dt 32, 4.15.18.30.31).

Salmo 18, 2-4

Yo te amo, Señor, mi fuerza,
3 Señor, mi Roca, mi fortaleza y mi libertador,
mi Dios, el peñasco en que me refugio,
mi escudo, mi fuerza salvadora, mi baluarte.
4 Invoqué al Señor, que es digno de alabanza
y quedé a salvo de mis enemigos.

(Bibliografía: Luis Rivas, Diccionario de Símbolos y figuras de la Biblia, Ed Amico)

PIEDRAS Y ESCRITURA

Antiguamente, los documentos más importantes se grababan con cincel en tablas de piedra. El caso más emblemático es el de las tablas de la Ley (Ex 24,12). Tengamos en cuenta que importantes registros de la antigüedad se han conservado grabados en piedras de monumentos y de lápidas mortuorias.

La roca y las piedras, por su dureza y frialdad, también pueden representar la insensibilidad de los corazones.

El profeta Jeremías, anuncia que la Nueva Alianza ya no estará escrita en piedra, sino en los corazónes: Jer 31,31 ss.

31 Llegarán los días – oráculo del Señor – en que estableceré una nueva Alianza con la casa de Israel y la casa de Judá.32