Novios en Camino: el amor expresado en el perdón

martes, 14 de julio de 2015
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14/07/2015- El miércoles 1º de Julio se transmitió por Radio María el tercer encuentro de “Novios en Camino”, el retiro radial que el Padre Gustavo Antico y su equipo nos invitan a realizar para nutrirnos y reencontrarnos en pareja, matrimonio o para prepararnos a construir un camino junto a alguien. En esta ocasión, lo acompañaron Raúl y Felicitas, un matrimonio que, luego de 48 años juntos, 7 hijos y 10 nietos, nos quiso compartir su experiencia a cerca del perdón el proyecto de vida.

¿Me cuesta perdonar? ¿Qué es lo que me cuesta perdonar? Duante el noviazgo buscamos nutrir el camino que vamos preparando o redescubrir la manera de crecer y preparar el futuro que queremos. Esto implica algo muy importante también: detenernos para sanar. En nuestro andar nos encontramos con dificultades, cosas que hacen ruido, desentendimientos, heridas o incomprensiones. En la medida que no nos perdonamos, la relación se detiene, hay dolor, pero detrás de nuestra dificultad de reencontrarnos, perdura el deseo de reconciliarnos.

Nuestra realidad humana no es perfecta. Las personas somos distintas. Particularmente, las relaciones entre hombres y mujeres pueden ser complejas por las diferentes formas que tenemos de ver la vida. A veces, lo que a mí no me molesta puede herir a quien tengo a mi lado. “Amar, entre muchas cosas, es perdonar. Si no descubrimos que el noviazgo es una preparacion a un proyecto futuro, el resentimiento con aquel que amamos, a la larga, no nos hace felices a nosotros mismos”, comentó Raúl. El perdon forma parte de la construcción del amor, y así como Dios nos ofrece su perdón también espera que lo ofrezcamos a nuestros hermanos.

“Uno madura la relación en la medida que vivimos el camino con humildad y somos capaces de entrar en nuestro propio corazón”, dijo el padre Antico. El propósito que da sentido a la relación que se va construyendo es que podemos aprender juntos. Como insiste el Santo Padre: “Dios no se cansa de perdonarnos. No nos cansemos nosotros de pedir perdón.”