Si ya conocés a Jesús, si escuchaste Su Palabra, si experimentaste Su Amor: debes vivir con radicalidad tu vida.
Él lo da todo y quita nada. Pero, te pide todo.
Él exige renuncias: no podés seguir como hasta ahora, Su inmenso Amor te transforma y vos sos una nueva persona, debes renacer de lo alto, del Espíritu…
Cuidado con lo que lees
con lo que ves en la tele
con lo que buscás en internet
con las salidas
con el alcohol
con las chicas/los chicos
¡Cuidado! que el enemigo es muy astuto… te presentará millones de tentaciones… tu naturaleza aún desordenada querrá caer, pero recuerda que Dios está con vos ¡Él ya ha vencido al mundo!
Él te deja armas para esta lucha (porque la vida de fe, la vida en el espíritu ¡es una lucha!):
-la armadura del cristiano (Efesios 6, 10-17)
-los sacramentos, que son fuentes de Vida
-el rezo del santo rosario.
No tengas miedo. Debes ser valiente.
¡Animate a corresponder al inmenso Amor de Dios!.