Llega la primavera, y naturalmente una buena onda nos toma el corazón. Nos sentimos más alegres, tenemos más energía, y vuelven las ganas de vivir con intensidad, de retomar la actividad fisica y la vida al aire libre. ¡Qué lindo que nos pase esto! Pero también queremos que dure para siempre, que no dependa de la epoca del año, sino que encontremos la verdadera alegría y primavera, que viene luego de la ofrenda de la vida.
Compartimos unas palabras de Monseñor Jorge Lozano, obispo de gualeguaychú, que quizo compartir con nosotros los jóvenes en este día.