Evangelio según San Lucas 21,20-28

martes, 27 de noviembre de
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Jesús dijo a sus discípulos: 

 

“Cuando vean a Jerusalén sitiada por los ejércitos, sepan que su ruina está próxima. Los que estén en Judea, que se refugien en las montañas; los que estén dentro de la ciudad, que se alejen; y los que estén en los campos, que no vuelvan a ella. Porque serán días de escarmiento, en que todo lo que está escrito deberá cumplirse. ¡Ay de las que estén embarazadas o tengan niños de pecho en aquellos días! Será grande la desgracia de este país y la ira de Dios pesará sobre este pueblo. Caerán al filo de la espada, serán llevados cautivos a todas las naciones, y Jerusalén será pisoteada por los paganos, hasta que el tiempo de los paganos llegue a su cumplimiento.

 

Habrá señales en el sol, en la luna y en las estrellas; y en la tierra, los pueblos serán presa de la angustia ante el rugido del mar y la violencia de las olas.

 

Los hombres desfallecerán de miedo por lo que sobrevendrá al mundo, porque los astros se conmoverán. Entonces se verá al Hijo del hombre venir sobre una nube, lleno de poder y de gloria.
Cuando comience a suceder esto, tengan ánimo y levanten la cabeza, porque está por llegarles la liberación”.

 

Palabra de Dios

 


P. David Pintos sacerdote de la Diócesis de San Ramón de la Nueva Orán

 

En el Evangelio Jesús nos describe como será el momento final de Jerusalén. Describe como será el suceso y como se sufrirá. Describe también algunas acciones que habría que tener para no participar del sufrimiento. Y después nos dice que después todo el sufrimiento llegara él con gloria, y que ahí levantemos la cabeza porque nos llegará la liberación.

 

Este pasaje del Evangelio nos ayuda a pensar y a estar prevenidos para cuando llegue el fin de los tiempos. Eso. El Evangelio nos ayuda a estar preparados para cuando nos llegue la hora final. Tenemos que estar bien preparados para cuando llegue ese momento. Pero más allá de todo el caos y sufrimiento que se describe, detrás de todo eso viene Jesús. Si detrás de todo los sucesos finales viene el encuentro con Jesús. Jesús que vendrá a rescatarnos. Jesús que vendrá a liberarnos. Jesús que vendrá a salvarnos. Sí, vendrá Jesús y se encontrará con cada uno. Y como nos decía el Papa Francisco en estos días ¿Te imaginas el encuentro con el Señor? ¿Qué le dirías?. Yo pregunto también ¿Qué es lo que harías en ese momento? ¿Llorarias de la emoción y lo abrazaría fuerte?.

 

Así que más allá de las descripciones que se hacen sobre el momento final de los tiempos, detrás de todo está el encuentro con Jesús. En vez de causarnos temor o miedo la lectura del Evangelio de hoy tiene que darnos muchas esperanzas. El Evangelio nos ayuda estar entonces prevenidos y preparados para el momento final.

 

Por eso veo muy necesario recordar las preguntas que el Papa Francisco nos hizo para estos días para ayudarnos a estar preparados y madurar más sobre lo que estamos haciendo cada uno. ¿Cómo será mi final? ¿Cómo me gustaría que me encontrase el Señor cuando me llame? ¿qué cosas debería corregir que no está bien? ¿cuáles debería escoger y llevar adelante porque son buenas?

 

Ah realizar entonces un buen examen de conciencia y acciones para así estar bien preparados para el encuentro con Jesús.

 

 

Oleada Joven