Oración ante el pesebre en Navidad

jueves, 26 de diciembre de
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Hola hermano, te quiero regalar esta oración que escribí hace un tiempito para esta Navidad. Mirá, te comparto un poco de lo que he orado, porque este tiempo es hermoso para el corazón. Dios, se hace ternura de niño, y nos espera en el pesebre para acogernos. Junto a su cunita, no hay pobres ni ricos, solo hermanos que acudimos a adorar al Salvador, el Niño Dios.

Una cuestión práctica: gurí significa niño.

 

Padre nuestro, has querido que sepamos lo mucho que nos amás, y por esto, nos has colmado con la gracia de la Encarnación de tu Hijo: Jesús.

Dulcísimo Jesús, que te hacés gurisito por amor, y venís a nacer en el pesebre del corazón, en el pajonal de nuestra vida, ponemos entre tus bracitos todo lo que somos, ¡tomalo! Es todo tuyo.

Danos tu Santo Espíritu, para que, con ayuda de María, madre nuestra, podamos hacer de nuestro corazón ese vientre que pueda gestarte en él, verte formarte y hacerse uno en el amor.

Concedenos la gracia de ser como el buen José, que te recibe con dulzura, aunque tenga manos toscas; te recibe con alegría, a pesar de las tristezas de la vida; se da todo entero por vos, a pesar de los cansancios.

Y por último, danos un corazón de gurí como el tuyo; un corazón inocente, risueño y lleno de la gloria de Dios, para que, como vos lo hiciste, podamos anunciar las maravillas del amor del Padre en esta Navidad.

¡Ven, Señor Jesús!

Amén