Misionero argentino padre de 120 huérfanos del ebola en Sierra Leona

viernes, 31 de octubre de 2014
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Padre Jorge Crisafulli

 31/10/2014 – Un misionero argentino es el principal responsable de la recepción y cuidado de los niños que quedaron huérfanos a causa del ébola en Sierra Leona. Junto con otros tantos sacerdotes, religiosos y laicos, el Padre Jorge Crisáfulli, sacerdote salesiano de Don Bosco, combate la devastación que la epidemia va dejando a su paso por el África y ya son más de 100 los niños que están bajo su cuidado.

En diálogo con Radio María el Padre Jorge sostuvo que “estamos perdiendo la batalla” contra la enfermedad y lamentó que el mundo occidental se haya acordado muy tarde del virus letal: “El ébola está presente en estas tierras desde el `75 en animales y desde hace un tiempo se trasladó al cuerpo humano; no es algo de este año. (…) Las potencias hablan de la importancia de ayudar a África ahora que ven que el ébola amenaza a sus países”.

Recoger a los que quedan huérfanos

El sacerdote argentino, junto a su equipo de trabajo, reciben a los niños que por causa de la epidemia quedan sin familia. “Peor que el ébola es el miedo, el pánico y el sentido de aislamiento. Los países no reciben a quien viaja de éstas zonas” comentó el P. Crisáfulli. Comentó que en Sierra Leona hay alrededor de 80 infecciones diarias, lo que supone un altísimo nivel de emergencia sanitaria.

Los niños llegan confundidos; además de lo que supone la muerte de sus padres comienzan a sufrir la discriminación por “sospecha de ébola” o más grave, que se los acuse de brujería. ¿Cómo se trabaja con ellos? El P. Jorge responde esperanzado y sonriendo, como lo haría su Fundador Don Bosco: “Lo nuestro es la sonrisa, el cariño y el amor (…) La idea nuestra no es tenerlos mucho tiempo sino atenderlos e intentar encontrar algun familiar que los reciba”. Contó que en los casos en que las familias más cercanas son numerosas, se intenta otorgarles algun aporte económico para cubrir gastos de alimentación y ropa. “También sabemos que un chico huérfano está para siempre por ende buscamos ver cómo ocuparnos hasta que crezcan y se inserten” indicó el P. Jorge en relación a aquellos niños que no tiene quién los reciba.

 

Esperanza en medio del dolor

El ebola está generando estragos en Sierra Leona y otros países africanos, y se entremezcla el dolor, con la impotencia y la desesperación. ¿Cómo vivir con esperanza en medio de la muerte y el dolor?. El P. Jorge no esconde su emoción; vivir en África le ha ido moldeando el corazón para el sufrimiento y para la esperanza.

Contó que el “el Dios Padre no mira desde el cielo cómo sufrimos, sino que Él está crucificado en cada niño, esperando la resurrección” y que se confían a María Auxiliadora.”La esperanza es un don. El miedo paraliza, te hace pensar en tus propios intereses y la esperanza te hace confiar en Dios (…) Tenemos que superar el “habriaQueísmo”y como dice Madre Teresa poner el amor en obras”. Además confesó que, tal y como lo hacían los esclavos africanos, cantan el “vamos a triunfar”.

Hacia el final de la comunicación, mientras iban llegando las repercusiones de su testimonio entre los oyentes de Radio María, se emocionó hasta las lágrimas.