mirar con tus ojos quiero

miércoles, 20 de agosto de
image_pdfimage_print

No es Dios

el que nos condena

somos nosotros

quienes nos condenamos.

No es Dios 

el que nos juzga

somos nosotros

lo que nos juzgamos

sin medida

y muchas veces lastimando.

Si aprendiéramos 

a “ver” con los ojos

que miro jesus,

no existiría

el odio,

la calumnia

y la injuria

contra un hermano.

Si aprendiéramos 

AMAR

como El nos amo

no dudaríamos

en “dar la vida”

en pequeños gestos cotidianos

 

MARIANA LONGO